Un anuario digital del grupo o institucional. Una bonita manera de atesorar los mejores momentos y testimonios de los protagonistas del año escolar.
¿Pero cómo enfrentar un emprendimiento de este perfil con poco tiempo, sin comprometer recursos económicos y utilizando lo que ya tenemos de tecnología?
Es un trabajo de pequeños avances mensuales y compromiso gradual de los alumnos en construcción colectiva. Al planificar nuestro emprendimiento de anuario escolar, tenemos que respondernos algunas preguntas previas.
1. ¿Qué queremos publicar?
2. ¿Con cuánto tiempo disponemos para armar esta publicación?
3. ¿Cómo intervendrán los alumnos tanto en insumos, ideas y proceso?
4. ¿Qué recursos económicos consumirá? ¿Será en papel o en digital?
5. ¿Cómo se distribuirá a niños y familias?
6. ¿Será un anuario de grupo, nivel o turno? ¿Cuento con la colaboración de más personas adultas?
En esta oportunidad imaginemos un volumen en formato digital, parecido a una revista electrónica. Contendrá imágenes con textos descriptivos al pie de cada una de ellas. Las cámaras que utilizaremos serán las de los equipos de Ceibal y aquella cámara usual que posea el docente para el uso cotidiano. Son útiles también las cámaras de celulares. La elaboraremos en una herramienta que permita exportar en formato PDF y nos otorgue libertad en la composición de cada página.
Al inicio de curso, el docente registrará las actividades. Tomará algunas imágenes y no será preciso tomar decenas de fotografías, pues luego nos apenará decidir que excluir de la publicación.
El espíritu en la confección de la publicación es que cada actividad se refleje en 3 a 5 imágenes por página. Tratemos, en tal sentido, que sean vistas amplias y abarcadoras de una buena cantidad de participantes. La idea es que en el paso de los años, cada fotografía sea una ventanita para espiar lo que ocurría en ese momento de los niños.
*Actos protocolares.
*Visitas de especialistas a la institución.
*Jornadas de integración comunitaria.
*Salidas planificadas por el barrio o a otras localidades.
*Kermesses o espectáculos benéficos.
*Día de la Educación.
*Momentos curiosos y/o espontáneos.
También se puede reservar una página para cada integrante de la clase, para que diseñe y redacte su perfil personal.
Algunas ideas para clasificar temporadas o temas.
Para tener un marco temporal de la secuencia del anuario es una idea atractiva tener algunos separadores con elementos visuales de la localidad. Por ejemplo, tomar un árbol o grupo de árboles añosos de hoja caduca y fotografiarlo en cuatro oportunidades (a la misma hora en lo posible). Fines de marzo, junio, setiembre y diciembre. Como lo intuye, el cambio estacional nos permite separa la cronología con hitos del cambio estacional. Al mismo tiempo, la imagen del árbol en la publicación puede ser convocante de un "volver al lugar" en fechas o temporadas determinadas.
Si visitamos alguna feria científica, museo o planta industrial, tengamos en cuenta obtener folletería o imágenes de la entrada o frente del lugar, para diseñar la carátula de la sección que el corresponderá a dicha salida.
¿Trabajos de plástica? ¿Intervenciones en el local escolar o en la comunidad? También tienen un lugar en el anuario. Fotografiar la cartelera con los dibujos exhibidos en las galerías, cumplirá el propósito de testimoniar la actividad. No es recomendado incluir escaneos de todos los dibujos, pues sería muy voluminosa la cantidad de material generado y el archivo resultante podría generar problemas a la hora de descargas o visualización.
Recordemos el concepto de que "menos es más".
Una vez finalizado el anuario, tendremos dos opciones.
La distribución en formato electrónico PDF. Si incluimos demasiadas imágenes tenemos el riesgo de que sea muy voluminosa en tamaño y no atraiga la idea de descargarla al dispositivo. A modo de ejemplo, en una prueba de publicación generada en PowerPoint, con 100 páginas y 200 fotografías el tamaño final del archivo PDF, generado con la herramienta gratuita de PDF resultó de 28 Megabytes (Mb). La misma presentación, elaborada en Presentaciones de GoogleDrive, una vez descargada como PDF resultó de 10 Mb. Es por esto que teniendo en cuenta que los resultados pueden ser variables, conviene ensayar diversas posibilidades.
En las siguientes secciones presentamos alternativas para que en cada caso ensaye y opte por la combinación que mejor le resulte a usted.
Un factor que puede ir en contra puede ser si sacamos las fotografías con una gran resolución (muchos megapixeles) y luego las pegamos en la publicación directamente sin desfragmentar su resolución. Con escalarlas para achicarlas no es suficiente. Para prevenir esto, considere tomar fotografías con pocos megapixeles de resolución o reduzca el tamaño en un editor de imagen de aquellas que vaya a utilizar. Para ahorrar tiempo, sería oportuno tomar directamente fotografías en baja resolución, pero queda a criterio de cada uno. Realice ensayos previos en las vacaciones e intercambie opiniones y resultados con colegas docentes en la escuela. Pueden surgir ideas muy buenas en tal sentido.
¿Y ahora cómo seguimos?
Ya estamos más encaminados. Tendremos que almacenar las imágenes en carpetas separadas en una PC o Magallanes. Convengamos una estructura para clasificar y encontrar sencillamente los recursos. Por ejemplo, una carpeta AÑO LECTIVO, que contiene a su vez subcarpetas de períodos trimestrales. Cada período trimestral contendrá subcarpetas nombradas como la actividad que contengan. Viendo el esquema, surgen algunas orientaciones que tendremos a la vista al momento de organizar la publicación. La primer jerarquía será la carátula del anuario. Los trimestres pueden ser nombres de capítulos (4 en este caso) y cada actividad puede intuirse como una sección dentro del respectivo capítulo. No desestimemos lo imprescindible que resulta tener un respaldo (backup) de las imágenes en otro lugar físico, para prevenirnos de la pérdida de fotos en casos accidentales. Con realizar la copia de la capeta AÑO LECTIVO con toda la estructura que contiene, resulta sencillo.
Como surge de la imagen, clasificar por meses y luego, por subcarpetas para cada actividad, nos permite organizar los recursos y no morir en el intento. Cuando tengamos listo un trimestre, ya podemos ir armando la parte que le corresponde en el anuario.
Tenemos imágenes pero simultáneamente apreciemos la conveniencia de ir almacenando también el texto asociado. En archivos de texto simple, sin formatos de ningún tipo, registramos los datos que acompañarán a las imágenes. (fechas, nombres de lugares, participantes, descripciones de las actividades y anécdotas graciosas). La descripción en total que no supere de tres o cuatro renglones.
Teniendo ya imágenes y textos, es momento de comenzar la composición del anuario. Un consejo para no saturarnos. Elaborar la publicación de modo incremental, no dejando la totalidad para el final del año. Digamos que tenemos elementos de marzo, abril y mayo. Entonces en junio podemos ir poniendo manos en la masa y ver como nos va quedando. Trabajando en modalidad incremental, tenemos oportunidad de corregir errores detectados tempranamente y la oportunidad de ir ganando experiencia en la herramienta que estemos utilizando.
¿Con qué herramienta compongo la publicación?
En plaza hay decenas de productos para maquetar publicaciones. Algunos gratuitos, otros de pago, y todos con diferentes curvas de aprendizaje.
En el concepto de "mantenerlo simple", en esta oportunidad les propongo componer el anuario en una herramienta ya conocida por muchos de nosotros; un generador de presentaciones.
Puede ser Impress(OpenOffice), PowerPoint(Microsoft) o una presentación en googleDrive (ex GoogleDocs).
Cada una tiene pros y contras, pero son pequeños matices en comparación con la funcionalidad general que usaremos que será; insertar fotos, cuadros con textos y alguna autoforma, wordart o líneas de colores. La sugerencia, avanzar en la tarea concentrándonos en lo básico; fotos, textos y título de la "diapositiva".
Les escribí diapositiva entre comillas, pues finalmente devendrá en una página de una publicación electrónica. Mantengamos eso en mente.
En la imagen superior es apreciable lo que les comentaba. A la izquierda una presentación en PowerPoint. A la derecha, la misma presentación, pero elaborada en GoogleDrive.
Nótese que no existen diferencias notorias. Lo que es apreciable es que optando por trabajar en una presentación en GoogleDrive, surgen algunas ventajas propias de la web 2.0, ya comentadas en anteriores oportunidades.
*es posible el trabajo colaborativo simultáneo.
*estamos a salvo de roturas o pérdidas de datos de nuestro disco duro o pendrive. La presentación está almacenada "en la nube".
Dejamos por tanto los aspectos de armado del contenido al criterio docente. Recordemos que luego cada página será visible en pantallas de 7 pulgadas. Es preferible que las imágenes se vean ocupando una buena parte de la superficie y que los textos se vean en gran tamaño, sin perjuicio de que las aplicaciones para lecturas de PDFs permiten la opción de aumento.
Exportando la publicación a formato PDF.
Luego de revisar la publicación, estamos satisfechos y queremos exportarlo al formato de destino, para probar que tal se ve en acción.
¿Cómo procedemos? La respuesta dependerá de cual es la herramienta que estemos utilizando, pero siempre es sencillo.
En caso de utilizar Impress o Presentaciones de LibreOffice, está incorporada la función "Exportar como PDF" en el menú Archivo.
En caso de utilizar PowerPoint, desde la versión 2007 en adelante también cuenta con esta posibilidad. En caso de no contar con la opción solo tenemos que instalar la impresora virtual de PDF, gratuita para descargar en http://www.dopdf.com/es/ . ¿Qué es una impresora virtual? Es muy sencillo en la práctica. Al estar trabajando en cualquier programa, usualmente para imprimir seleccionamos Archivo/Imprimir (o Ctrl+P) y emerge el cuadro de propiedades de Impresora. En general al imprimir, estamos acostumbrados que el trabajo sale "en papel y tinta". Por el contrario, con una impresora virtual PDF tenemos al alternativa de que la salida de impresión se dirija no al papel, sino que va a un archivo -en la ubicación que deseemos- con un nombre a elección y extensión PDF (portable document file).
Con ese archivo PDF tenemos luego dos alternativas. Si hubiese recursos y fuera preciso, cualquier imprenta del ramo podría tomarlo como insumo e imprimir varios ejemplares en papel para distribución física.
La otra opción es distribuirlo mediante la web. Colocándolo como adjunto a un artículo o página en alguna de las tantas opciones de publicación en web (edmodo, un espacio CREA, blog de clase, sitio en GoogleSites o donde sea que tengamos nuestro ecosistema digital de aula). Luego los niños y familias, ya sea con sus tablets o laptops de Ceibal, podrán descargarlo a sus equipos y pasar sus páginas. Lo fenomenal del formato PDF es que también es accesible en pantallas de celulares "smart", de modo tal que puede divulgarse también entre las familias. Los visores PDF en dichos celulares tienen funciones de zoom, para permitir la vista cómoda aún en pantallas pequeñas.
Video-álbum de momentos.
¿Con menos tiempo, pero aún con ganas de sorprender al grupo? Tenemos una alternativa para generar un video con momentos entrañables del curso. Rápido, sencillo y gratis.
Es muy breve. Tan breve que en tres sencillos pasos tenemos los resultados a la vista. Requiere para el maestro contar con una cuenta de usuario en Google, ya que utilizaremos tres servicios de los disponibles
Subiendo las fotos.
Utilizarás "Álbumes de fotos" de Google subiendo todas las fotos a un álbum online. Accede a (http://plus.google.com) y selecciona Fotos en el acceso de herramientas a la izquierda. Sube todas las fotos a una carpeta que llamaremos con un nombre distintivo, por ejemplo MIGRUPO2014. Asegúrate de tener todas las fotos subidas. (bonus: si quieres intercalar placas con textos o títulos, confecciónalas en Impress o Powerpoint y luego las exportas como JPEG o GIF. Obtendrás imágenes que harán las veces de placas textuales. Súbelas también como "fotos" y las intercalaremos en los lugares deseados)
Confeccionando el video en pocos clicks.
Identificado con tu usuario y contraseña de servicios de google, accederás a www.youtube.com.
Pulsas en el ángulo superior derecho el botón "SUBIR VIDEO" (1) y seleccionas dentro de las opciones disponibles a la derecha "Presentación de diapositivas de fotos."(2)
Una vez que accedes a esta herramienta, se abre tu espacio de álbumes de fotos. buscas el álbum de MIGRUPO2014. y seleccionando el álbum, importa todas las fotos contenidas al espacio del video. Tienes oportunidad de reorganizarlas. Busca debajo a la derecha el botón "Siguiente" y te abre un visualizador del video casi terminando, con opciones para cambiar el tiempo de visibilidad de cada fotografìa y el estilo de transición. Además contarás con herramientas para musicalizar básicamente la pieza final, contando con un amplio catálogo de piezas sonoras a tal efecto. Una vez satisfechos con el resultado, pulsas "Subir video" y luego de unos minutos te provee de una dirección para verlo. Por ejemplo en nuestro caso es http://youtu.be/jfNSrA42ORM
Abreviando la dirección web.
No es simpático andar digitando una dirección extensa sin sentido como palabra. Para aliviar este aspecto utilizaremos el servicio de acortamiento de direcciones de google. Ingresamos en el navegador en http://goo.gl (ge-o-o-punto-ge-ele) y tal como muestra la imagen, ingresemos la dirección en la zona 1 de la pantalla. Al pulsar "Shorten URL", en la zona 2 aparece la dirección abreviada (al menos más sencilla de copiar).
En la lista de direcciones abreviadas aparece al tope la dirección que acabamos de ingresar. Pulsemos en "Details", y entre un conjunto interesante de datos estadísitcos, encontraremos el código QR asociado a esa direcciòn. Los códigos QR se están utilizando mucho para facilitar el acceso a recursos web o para encapsular información. Siguiendo con el ejemplo, con este código QR puede acceder al video que nos ocupaba en el paso a paso. Nótese que como cualquier elemento gráfico, puede insertarse en el diseño de un marcalibros, postal, tarjeta, fotografía o en cualquier elemento susceptible de ser impreso.
Convengamos que resulta económico, ya que no requiere CDs ni otro soporte físico similar. Es factible de ser accedido con un código QR o enlace abreviado impreso en tarjeta o souvenir físico de recuerdo.
A modo de conclusión.
Lo digital ayuda a atesorar nuestros recuerdos, pero también constituye una dificultad, al tornarse obsoleta la tecnología actual con el paso del tiempo. ¿Recuerdan los VHS? Ahora es dificil visualizarlos, a menos que hagamos una conversión de formato.
Aunque tengamos nuestros anuarios digitales, igualmente vale la pena encargar la impresión de un par de ejemplares en papel para atesorar en la escuela. Las familias que así lo consideren, tambien tiene la oportunidad, ya que contando con el archivo PDF del anuario, existe la oportunidad de imprimir una copia física.
En algunos años, cuando las tablets y netbooks sean historia, el fiel papel estará allí, con los rostros sonrientes habitando una escuela de principios del siglo XXI. Hasta el próximo encuentro.